“Entre las ventajas que trae (el satélite) destacan la conectividad para las zonas remotas del país, y la comunicación entre la mayoría de los países de América Latina y el Caribe”.
Detalló que la estación terrena Luepa, ubicada en el Fuerte Manikuyá, es una estación secundaria que asume el control en caso de que surja un inconveniente en Base Aérea capitán Manuel Ríos (Bamari). “Hay una maniobra vía enlace satelital que nos permite manejar el satélite desde aquí”.
Se trata de chequear la salud del satélite mediante el control y la verificación de los parámetros internos, permitiendo tomar las medidas correctivas en caso de alguna contingencia o ante cualquier variación.
Las otras ventajas que este salto tecnológico estaría llamado a prestar a nivel nacional tales como: educación, salud, medicina, economía, producción, acceso al primer mundo tecnológico y de investigación estará sin lugar a dudas influido por la orientación hegemónica y centralizada del gobierno y su proyecto político, llegándose incluso a restringir el acceso a la información a todo aquella institución o ciudadano opuesto al concepto y filosofía socialista, como ocurre en Venezuela en la actualidad.
Desventajas
Con respecto a las desventajas, cabe citar el elevadísimo costo inicial, lo cual podría asumirse como un costo de oportunidad, que gracias al elevado retorno que percibe el Estado Venezolano por concepto del comercio de crudos y productos de origen hidrocarburos. Ello facilita esta adquisición que en el largo plazo podría, de acuerdo a las políticas de utilización, acceso, uso y aprovechamiento que este sistema satelital de comunicaciones aportaría a todos en todos los ordenes de naturaleza cultural, científico, educacional, productivo e investigación, que además, sea administrado con criterios imparciales alejados absoluta y totalmente de la imposición política e ideológica o de otros intereses sectoriales y contradictorios que en otros ámbitos afines (TV, radio, prensa escrita, cine e internet) se operan o imponen desde el gobierno venezolano, por el presidente y su equipo de asesores ideológicos.